Cuando hablamos de la figura de un autónomo, tal vez se nos venga a la cabeza aquel trabajador por cuenta propia que, bien tiene creada su propia empresa, bien trabaja individualmente para varios clientes. Pero ciertamente existen modalidades de autónomos que facturan a una misma empresa la mayor cantidad de sus ingresos, si no la totalidad.
En este post queremos mostrarte todo lo que necesitas saber sobre estas figuras de autónomos, así como cuánto puede facturar un autónomo a una misma empresa concretamente. Se trata de diferenciar entre dos condiciones de autónomo, que son las que te especificaremos a continuación.
De cualquier modo, nuestra gestoría y asesoría online para autónomos está a tu completa disposición para resolver cualquier duda o cuestión que puedas tener o que te pueda surgir de cara a dar un paso tan importante como es el de convertirse en autónomo.
Hace ya unos años que la figura del autónomo ha experimentado cambios y variaciones llegándose a consolidar en otras modalidades de ese autónomo tradicional. Si bien antes un autónomo era exclusivamente el trabajador por cuenta propia que no dependía de una empresa, actualmente el mercado de los autónomos ha aumentado considerablemente.
Ahora no hace falta trabajar por cuenta propia de forma estricta y como condicionante para ser considerado autónomo. A día de hoy existen dos figuras de autónomos que perciben sus ingresos de una misma empresa, en lugar de tener varios clientes como ocurriría con el autónomo tradicional. Hablamos del autónomo económicamente dependiente y del falso autónomo.
Un falso autónomo es aquel trabajador que, realmente, a nivel laboral y por sus condiciones de trabajo, no es más que un trabajador por cuenta ajena como cualquier otro empleado de una empresa. La diferencia que el falso autónomo tiene con un trabajador contratado y empleado de una empresa es que la figura del falso autónomo es ilegal en España.
Pero, entonces, ¿por qué existen los falsos autónomos? El falso autónomo es una figura que no llega a cumplir con los requisitos que le permitirían ser verdaderamente un autónomo, pero tampoco llega a ser un verdadero trabajador por cuenta ajena habitual. Esto es porque se trata de un trabajador que debe estar dado de alta en el régimen de autónomos, lo que hace que el falso autónomo no tenga los mismos derechos en una empresa que el resto de empleados, pero teniendo además que cumplir con el mismo tipo de obligaciones que los trabajadores de la empresa.
Entonces, el falso autónomo debe cumplir con una serie de obligaciones preestablecidas al estar dado de alta como autónomo, como son el pago de las cuotas correspondientes o las declaraciones de impuestos. Pero, unido a eso, en la empresa que trabaje como falso autónomo no podrá beneficiarse de los mismos derechos que los trabajadores por cuenta ajena dada su condición de autónomo, aunque sí deba cumplir con unos horarios fijos en su puesto de trabajo, con unas tareas directamente asignadas sin poder rechazarlas… es decir, su puesto de trabajo sería el mismo que si la empresa le contratase como un trabajador por cuenta ajena o como un empleado más, en lugar de como falso autónomo.
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