¿Qué es el crowdfunding? Se está hablando constantemente en los últimos meses en muchos foros, en el Gobierno y en Bruselas.
El crowdfunding es una alternativa de financiación colectiva para el emprendimiento y para financiar a la economía real en general. Ante la dificultad de acceso al crédito se buscan otras vías de financiación y así surge el crowdfunding. Se intentan recaudar fondos disminuyendo la dependencia de la economía de los bancos.
A diferencia de otros paises donde desde hace años está funcionando este instrumento de captación de dinero y de financiación, en España el crowdfunding ha despegado hace unos pocos años sin que haya una regulación completa y exhaustiva al respecto. Tan solo el pasado 28 de febrero de 2014 se aprobó el Anteproyecto en Consejo de Ministros y la Asociación Española de Crowdfunding con el fin de que se regule esta vía de financiación.
Empiezan las críticas ya que los límites a las inversiones son restrictivos: se establecen límites a la inversión por inversor de forma que no puede invertir más de 3.000 euros en un mismo proyecto y no más de 6.000 euros en un año, y los proyectos no podrán superar el millón de euros.
Uno de los aspectos más valorados de la regulación es la transparencia ya que las plataformas deberán inscribirse en el Banco de España o en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para que empiecen a funcionar.
Los nuevos emprendedores con sus proyectos de creación de pequeñas empresas y quienes invierten en ellas defienden, en línea general, positivamente la regulación de la capitalización alternativa excepto en los límites a las inversiones ya que se sitúan por debajo de la media de otros países. Para que nos hagamos una idea: países como Francia, Italia o Inglaterra no tienen límites a las aportaciones de los inversores. En Estados Unidos los inversores tienen un límite de hasta 100.000 dólares al año, mientras que en Alemania el límite para el inversor es de hasta 100.000 euros en equity, pero no hay límites en préstamos ni en recompensas.
¿Como se entiende que se quiera regular el crowfunding en España con tantas limitaciones en las inversiones, cuando en el mundo se está experimentando un vertiginoso crecimiento con 5.100 millones de dólares (3.696 millones de euros) en 2013, doblando las inversiones del ejercicio anterior, previendo además un crecimiento de más de un 1.000% en los próximos 5 años? Y por otro lado siendo España uno de los países de la Comunidad Europea con más dependencia de la banca, ¿ no se debería incentivar reducirla, buscar otros canales alternativos a la financiación tradicional y fomentar la creación de empresas?
¡No cortemos las alas a los financiadores! Será difícil tirar adelante un proyecto empresarial de 600.000 euros si se necesitan buscar 200 inversores con el sistema del crowfunding. Hay que dar a las inversiones, a los inversores y no trabas en la expansión de un modelo que está funcionando y permitiendo abrir empresas, crear empleo y sobretodo ilusionar a los nuevos empresarios y jóvenes en transformar sus ideas en proyectos reales.
Fausto Di Pasquale
Asociado
